Para muchos países en desarrollo, el turismo es una importante fuente de ingresos, divisas, ingresos fiscales y empleo. Dado que el turismo conecta a las personas con la naturaleza, el turismo sostenible tiene la capacidad única de estimular la responsabilidad medioambiental y la conservación.

El turismo sostenible, incluido el ecoturismo, es una actividad multisectorial que puede contribuir a las tres dimensiones del desarrollo sostenible y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible fomentando el crecimiento económico, mitigando la pobreza, creando empleo pleno y productivo y trabajo decente para todos.

También puede contribuir a acelerar el cambio hacia modelos de consumo y producción más sostenibles, y promover el uso sostenible de los océanos, los mares y los recursos marinos. Puede fomentar la cultura local, mejorar la calidad de vida de las mujeres y los jóvenes, los pueblos indígenas, las comunidades locales, y empoderarlos económicamente, promover el desarrollo rural y la mejora de las condiciones de vida de las poblaciones rurales, incluidos los pequeños agricultores y los agricultores familiares.

El uso del turismo sostenible y resiliente, como instrumento para fomentar el crecimiento económico sostenido e inclusivo, el desarrollo social y la inclusión financiera, posibilita la formalización del sector informal, el fomento de la movilización de recursos nacionales y la protección del medio ambiente y la erradicación de la pobreza y el hambre, incluidas la conservación y la utilización sostenible de la biodiversidad y los recursos naturales, y la promoción de la inversión y el emprendimiento en el turismo sostenible.

El Día Mundial de la Resiliencia del Turismo (17 de febrero), proclamado por la Asamblea General en su resolución, tiene por objeto hacer hincapié en la necesidad de fomentar el desarrollo de un turismo resiliente para hacer frente a las conmociones, teniendo en cuenta la vulnerabilidad del sector turístico a las emergencias. Es también un llamamiento a la acción para que los Estados Miembros desarrollen estrategias nacionales de rehabilitación tras las perturbaciones, incluso mediante la cooperación entre el sector público y el privado y la diversificación de actividades y productos.

Fuente: https://www.un.org/