Capítulo 17 | Ardiente amor y vehemente deseo de recibir a Cristo
1. Señor, deseo recibirte con la más viva devoción y con el más inflamado amor, con todo el afecto y fervor del corazón, del mismo modo que desearon recibirte en…
1. Señor, deseo recibirte con la más viva devoción y con el más inflamado amor, con todo el afecto y fervor del corazón, del mismo modo que desearon recibirte en…
3. Ojalá pudiera quemarme totalmente en tu presencia, consumirme y transformarme en ti; de suerte que sea un solo espíritu contigo por la gracia que produce esa unión íntima y…
2. Aquí me tienes ante ti, pobre y desnudo; me acerco a pedirte gracias y a implorar misericordia. Da de comer a este mendigo tuyo que tienen hambre, inflama mi…
1. Dulcísimo y amorosísimo Señor, a quien ahora mismo deseo recibir con mucha devoción, tú conoces mi debilidad y la miseria que me aflige; tú sabes en cuántos males y…
4. Entonces verá y se henchirá de emoción, se admirará y se dilatará su corazón (Is. 60, 5), porque con él está el poder de Dios (Ez. 3, 14; Lc.…
3. Tan pronto como te entregues a Dios con todo tu corazón y, sin buscar esto o aquello conforme a tu deseo o querer, y te pongas enteramente en sus…
2. Si siempre se nos concediera la gracia inmediatamente y se nos entregara con la misma formulación del deseo, el hombre en su fragilidad, no la sabría aprovechar. Por eso…
1. Es necesario que te esfuerces en buscar sin descanso la gracia de la devoción, pedirla insistentemente, esperarla con paciencia y confianza, recibirla con gratitud, conservarla con con humildad, cooperar…
3. Poderosa es tu misericordia para concederme la gracia que imploro y llenarme de espíritu de fervor cuando tú te dignes visitarme con toda tu bondad en el día que…
2. Verdaderamente ardiente esta fe, tanta que por sí misma puede constituir una prueba de tu sagrada presencia. Estos devotos son los que realmente reconocen a su Señor en la…