Capítulo 9 | Ofrecernos a Dios con todo lo nuestro y rogarle por todos
1. Señor, todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, son tuyas. No obstante, quiero entregarme a ti como ofrenda voluntaria y ser tuyo para siempre. Señor,…
1. Señor, todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, son tuyas. No obstante, quiero entregarme a ti como ofrenda voluntaria y ser tuyo para siempre. Señor,…
2. Así como sin mí no podrían satisfacerte todos los bienes, así también a mí no pueden agradarme tus dones si, con ellos, no te entregas a ti mismo. Ofrécete…
1. Así como yo, con los brazos abiertos y con el cuerpo desnudo sobre la cruz, me ofrecí espontáneamente a Dios Padre por tus pecados de modo que nada quedó…
4. No hay ofrenda más meritoria ni satisfacción mayor para borrar lo pecados que el ofrecimiento total y perfecto de sí mismo a Dios juntamente con el sacrificio del cuerpo…
3. Después de haber confesado y deplorado estas faltas, y todas las otras que hubiere, con dolor y gran pena por haber sido tan frágil, formula el firme propósito de…
2. Llora y duélete amargamente por ser todavía tan carnal y mundano, tan poco mortificado frente a las pasiones y tan propenso a secundar los impulsos de las malas inclinaciones.…
1. Sobre todas las cosas es necesario que el sacerdote de Dios se prepare a celebrar, a tocar y a comer este sacramento con suma humildad de corazón, con respeto…
3. El sacerdote, revestido con los ornamentos sagrados, representa a Cristo, para elevar a Dios súplicas reverentes y humildes, tanto para sí como para todo el pueblo. Lleva, sobre el…
2. En este sublime sacramento, pues, debes creer más a Dios todopoderoso que a tus sentidos o a los signos visibles. Y por eso el hombre debe acercarse a esta…
1. Aunque tuvieras la pureza de los ángeles y la santidad de san Juan Bautista, no serías digno de recibir ni de tocar este sacramento. Porque no depende de los…